¿Qué es una unidad SATA?
SATA es un término común en el mundo del almacenamiento de datos. Lo más probable es que lo haya visto al buscar actualizar su PC, portátil u otro dispositivo, como, por ejemplo, una consola de juegos. Con esto, a pesar de su ubicuidad, este término suele crear cierta confusión, especialmente para las personas que rara vez se meten con el hardware de la computadora. En este artículo se explica su significado real y se resaltan las principales características de las unidades basadas en esta tecnología.
La introducción a SATA
Lo primero que hay que entender es que SATA, de hecho, no es un tipo de unidad, sino una interfaz para transferir datos a y de ella. En otras palabras, se trata de medios particulares para conectar un dispositivo de almacenamiento a la placa base del ordenador. Pero aunque el término se refiere específicamente a la interfaz, generalmente se usa para describir no sólo los enchufes, los cables y los puertos, sino también las unidades del estándar SATA.
El acrónimo SATA es Serial Advanced Technology Attachment. Esto implica que la transmisión de datos se realiza bit a bit, a diferencia de los flujos concurrentes empleados en el modelo paralelo más lento. La interfaz Parallel Advanced Technology Attachment o PATA con sus voluminosos cables de cinta era principal hasta que se introdujo SATA.
La interfaz SATA se originó a principios de la década de 2000. Se introdujo como resultado de la colaboración entre Intel, IBM, Dell, APT, Maxtor, Seagate y otros gigantes tecnológicos. Actualmente, el estándar es mantenido por una organización internacional que comprende más de 90 empresas de diferentes industrias.
Aunque apareció en los días de los discos duros rotatorios, más tarde, la interfaz SATA también se hizo propia de los discos ópticos y de aquellos de estado sólido. Los discos duros basados en SATA pueden ser de 2,5 o 3,5 pulgadas, mientras que los SSD suelen tener el factor de forma más pequeño de 2,5 pulgadas.
Imagen 1. Factores de forma de los HDD y SSD de SATA.
En la actualidad, SATA sigue siendo el método más común para conectar dispositivos de almacenamiento internos y es compatible con la más amplia gama de computadoras de escritorio, portátiles y muchos otros equipos informáticos. Aún así, el despliegue de tecnologías de alta velocidad más compactas ha llevado a una disminución de su popularidad.
Inicialmente, SATA permitía transferir datos a una velocidad de hasta 150MB/s. Desde entonces, ha habido varias revisiones, hasta SATA de la tercera generación, comúnmente conocida como SATA 3 o SATA III, con la velocidad máxima de 600MB/s. Esta velocidad es bastante alta, pero palidece en comparación con la de hasta 7GB/s de las unidades SSD en NVMe modernas.
Una unidad SATA puede comunicarse con el resto del sistema en varios modos del controlador SATA: un modo AHCI estándar o un modo IDE obsoleto. El protocolo AHCI asegura mayores velocidades de intercambio de datos y permite beneficiar de otras ventajas de SATA. En el modo IDE una unidad funciona como un dispositivo IDE/PATA más lento, lo que garantiza su compatibilidad con el hardware antiguo. En adición, cabe mencionar un modo RAID que hace que varias unidades funcionen como una matriz en diferentes variaciones de RAID y también habilita las características de AHCI.
Los básicos de los conectores SATA
El estándar ha sido actualizado repetidamente, sin embargo, el diseño físico se ve más o menos igual en diferentes versiones de SATA. Cada unidad SATA tiene un puerto de datos en forma de L más pequeño, a través del cual la información se transfiere entre ella y la placa base. Un puerto de alimentación en forma de L más grande sirve para suministrar electricidad desde la fuente de alimentación del sistema host.
Imagen 2. Puertos de datos y de alimentación en un disco duro SATA.
Los conectores que se adjuntan a estos puertos también van en dos tipos: un conector de datos y uno de alimentación. El conector de datos tiene seis pines horizontales. Puede ser recto o inclinado a la izquierda/derecha para una mejor flexibilidad. El de alimentación tiene 15 pines, y ha reemplazado al conector Molex obsoleto de 4 pines.
Imagen 3. Conectores de datos y de alimentación SATA.
Algunos de ellos también cuentan con un pestillo de bloqueo que ayuda a evitar la desconexión accidental.
Imagen 4. Conectores SATA con bloqueo.
Dichos conectores se pueden encontrar en los extremos de los cables respectivos. El cable de datos SATA es un cable plano y grueso que suele ser rojo o negro. Por lo general, es de hasta 1 metro de longitud. El cable de alimentación SATA generalmente se consta de cinco hilos que pueden ser negros o de colores.
Los cables SATA de perfil bajo son mucho más delgados que los estándar y pueden caber debajo de las tarjetas gráficas largas que tienden a impedir el acceso a algunos de los puertos SATA en la placa base.
Imagen 5. Cable SATA de perfil bajo.
Tanto los cables de datos como los de alimentación son imprescindibles para cualquier unidad SATA. Es posible desconectarlos mientras el sistema aún está funcionando gracias a la función de SATA conocida como el cambio en caliente.
Sugerencia: Por favor, lea el artículo que le ayudará a elegir el método más adecuado para conectar una unidad SATA a una computadora.
Otras interfaces basadas en SATA
A lo largo de los años, se han lanzado al mercado unas interfaces alternativas basadas en SATA. No obstante, no son intercambiables y no deben confundirse con la SATA original, ya que, en la mayoría de los casos, el sistema host debe contar con un conector correspondiente para instalar la unidad.
mSATA es una versión en miniatura del conector SATA que se diseñó para el uso con los SSD de varios dispositivos portátiles, como computadoras portátiles y tabletas. Estas unidades tienen un factor de forma más pequeño, consumen menos energía y no necesitan el cableado SATA habitual.
Imagen 6. Unidad de estado sólido mSATA.
M.2 SATA es otra versión compacta de la interfaz SATA integrada en el factor de forma M.2 de SSD. Estas unidades también se conectan directamente a la placa base y ocupan incluso menos espacio en el sistema. El módulo puede estar equipado con un conector de llave tipo B o uno universal tipo B+M, pero a diferencia de las unidades PCIe M.2 con llave M, no puede utilizar el protocolo de comunicación NVMe avanzado.
Imagen 7. Unidad de estado sólido M.2 SATA.
SATA Express es una nueva expansión de la interfaz SATA normal. La variante combina dos conectores de datos SATA con un tercer conector más pequeño que brinda dos carriles PCIe. Debido a esto puede servir de host para hasta dos unidades SATA o para una sola unidad de estado sólido PCIe de alta velocidad. Además, SATA Express es compatible con el protocolo AHCI, y por tanto, sigue siendo compatible con entornos más antiguos, y puede emplear NVMe con dispositivos PCIe.
Imagen 8. Conector SATA Express.
eSATA es una variante de SATA destinada a la conexión externa. Tiene un enchufe de forma diferente adaptado para el manejo brusco y unos cables más largos de hasta 2 metros. Aún así, hoy en día, es difícil encontrar unidades externas con este estándar.
Imagen 9. Conector eSATA.
Micro SATA (uSATA) es un conector SATA combinado de datos y de alimentación diseñado para las unidades de estado sólido o los discos duros SATA ultracompactos de 1,8 pulgadas.
Imagen 10. Conector micro SATA.
Sugerencia: Consulte el artículo sobre la identificación del tipo de interfaz de un disco duro si está interesado en otros tipos de interfaces y quiere aprender a reconocerlos.
Última actualización: el 15 de noviembre de 2022